George Bush quiere ofrecer a su amigo Tony Blair una despedida sonada, claro que en la Casa Blanca, no estan para tirar muchos cohetes y si para buscar salidas urgentes a esos atolladeros que han marcado las relaciones mas apasionadas entre británicos y estadounidenses. Bush dedicará a Blair todo su tiempo, maxime cuando oyó anoche en televisión los piropos que su amigo le dedicaba desde el telediario mas visto en este pais. hablaran hoy sin altavoces y sin necesidad de dar la cara… reservándose para la mañana del jueves una comparecencia conjunta donde responder a la prensa sobres las agendas que han llevado casi de la mano. Irak, Iran, Darfur, cambio climático… y eso ademas, -como ya se ha dicho- sin olvidarse de dar al primer saliente Tony Blair la posibilidad de aportar nuevas ideas para arreglar el contencioso llamado Wolfowitz y Banco Mundial. Este miércoles sera solo el principio, después habrá que esperar la sorpresa… como aquel primer día en los jardines de Camp David donde el tejano sorprendio al ingles diciéndole que sus buenas relaciones estaban garantizadas al haber descubierto que usaban la misma pasta de dientes. Blair entonces, solo pudio ponerle humor británico a la cuestión… George, no cuentes ahora como te has enterado.
miércoles, 16 de mayo de 2007
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