Peter Pace, el jefe del alto estado mayor a quien George Bush pasará a la reserva el próximo 30 de septiembre, tiene estos días una mision bien delicada… Los Angeles Times dice que Pace llevará a la casa blanca una solicitud urgente del estamento militar: retirar de Irak a la mitad de sus efectivos para que los ejércitos estadounidenses puedan hacer frente a otras necesidades. La reunión Bush-Pace –con el beneplácito y la anuencia del ministro de la guerra Robert Gates, quien dicen favorable a la tesis- será privada y antes de que el general Petreaus –dice el periódico- insista en el capitolio de Washington en mantener las veinte divisiones-162 mil soldados- que en la actualidad prestan servicio en Irak, y eso y como muy pronto hasta finales del año 2008. La muchos y muy diferentes criterios que exiten sobre el particular -sean militares o políticos, quienes hablen- estan a flor de piel. Un republicano, con el prestigio y la autoridad del senador por Virginia John Warner, aboga por mandar un mensaje al gobierno iraki y replegar al menos a cinco soldados para las próximas navidades. The New York Times prefiere llevar a su portada la denuncia de dos organizaciones humanitarias –aunque solo cita a la Cruz Roja Iraki- apuntando que desde que George Bush decidiera incrementar la presencia de sus tropas a primeros de este año, cientos de iraquies –hasta medio millón mas de personas- han elegido abandonar sus casas y sumarse al millón largo de desplazados que -sin proponérselo- están acelerando la división del país en encalves sectarios.
viernes, 24 de agosto de 2007
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