El próximo martes George Bush tendrá sobre su mesa el proyecto de ley que menos puede gustarle para la guerra de Irak. Los demócratas, el Senado -con sus 51 votos a favor y 46 en contra- ha ratificado lo que anoche aprobaba la Cámara de Representantes. Si el presidente quiere y necesita 127 mil millones de dólares extras para la guerra de Irak tendrá que ordenar el regreso de sus tropas a casa a partir del proximo mes de julio… Caso contrario –es lo que anuncia desde hace semanas- tendrá un problema. Vetara el proyecto que no convertiré en ley pero se quedara sin fondos especiales para la guerra. Lo siguiente - para los demócratas que como Harry Read prefieren no levantar la voz y hasta hablar de un proyecto imperfecto aunque garantiza la seguridad que desde hace años se ignoraba- lo siguiente será esperar y ver… Esperar si la “compasión y el dialogo bipartidista” tantas veces cacareado por esta administración se aviene a razones, o si por el contrario los demócratas siguen acelerando, marcando distancias con los republicanos como harán esta misma noche, a partir de la siete –una de la madrugada en España- cuando ocho presidenciales como Hillary Clinton, Barak Obama, Jhon Edwards, más senadores como Dobb o Biden, se midan en el que quiere ser el primer duelo electoral de la familia demócrata en la Universidad de Carolina del Sur y con la cadena de televisión NBC como anfitriona y altavoz multiplicador de ideas y de sueños.
jueves, 26 de abril de 2007
DEMOCRATAS A LA CARRERA
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