La CIA se confiesa

La historia secreta de la Agencia Central de Inteligencia ha empezado a ser menos secreta. Dos juegos históricos de documentos –veinte años de guerra fria entre 1953 y 1973- pueden ser leidos y escudriñados en una dirección de internet que desde hace unas horas esta al alcance de todos los mortales. En la página www.foia.cia.gov puede con paciencia y con dificultad llegarse hasta las 700 páginas donde se desclasifican las llamadas “joyas de familia” o a las once mil –si once mil páginas que tienen otros 147 documentos- recogidos bajo la colección Caesar-Polo-Esau. Misiones para asesinar a dirigentes extranjeros como Fidel Castro o Rafael Trujillo, secuestros, escuchas a periodistas, investigaciones y experimentos con sustancias químicas así como las mas polémicas actividades de la CIA quedan al descubierto bajo una regla que puede aclarar todos los contenidos… Se hacer primar “el contrato social que la agencia tiene con los estadounidenses, pero sin renunciar al sagrado principio de proteger los secretos y la seguridad de la nación”
TINTA DE CALAMAR
La Agencia Central de Inteligencia se ha ganado de nuevo honores de portada, primeros minutos en las radios, en los informativos de la televisión y ahora en las portadas de los periodicos que llegan a una misma conclusión… los secretos que ofrece la cia son como la tinta del calamar, ponen en evidencia chapuzas e incopentencias, pero pueden ayudar a distraer las controversias actuales que desde los atentados del 11 de septiembre del 2001 soporta la agencia de agencias. El director Michael V. Hayden es el primero en advertir a navegantes… los cientos de documentos desclasificados –la historia de la cia entre 1953 y 1973, con sus joyas de familia- es un contrato debido a los estadounidenses aunque desde el ineludible principio de no violentar ni poner en peligro los secretos que puedan afectar a la seguridad de esta nación. Asi las cosas, lo que ahora puede con mucha paciencia y experiencia buscar en en la pagina de internet www.foia.cia.gov no es mas de lo que ya todos sabían o podían imaginar. Los documentos sugieren el poder ilimitado de la agencia, -dicen de inmediato los expertos- aun a pesar de las chapuzas que dejaban en manos de la mafia la vida de Fidel Castro o el asesinato del dominicano Rafael Trujillo, por no seguir con la contra-guerra de Vietnam, los robos en la embajada chilena de Washington, los micrófonos ocultos en Las Vegas para saber más del Waterwate organizado por ex-agentes, los secuestros o escuchas ilegales que ordenaban presidentes como Nixon o Jhonson saltándose la ley y las advertencias de directores como Hunt que terminaban plegándose a los deseos de la Casa Blanca… Medios tan influyentes como The New York Times historias burocráticas, mas que nada, con funcionarios pagüatos capaces de gastarse los cuartos en crece pelos o en trajes hippies, incapaces de evitar chapuzas e incompetencias mil, muy lejos todavía de ser la verdad y nada mas que la verdad que sigue guardada bajo siete llaves en los cuarteles generales de Langley