Las recta final de las elecciones de mitad de mandato tiene cita en el estado de Virgina en una hora escasa… Todo hace pensar que el senador republicano George Allen concedera -aquí a las tres de la tarde- la victoria al candidato demócrata Jim Webb, un demócrata descafeinado que fue republicano hasta antes de ayer y secretario de la armada con el presidente Ronald Regan, aunque capaz de robarle la cartera al senador Allen por 7.200 votos, suficientes para que sus asesores –los que soñaban verle en una carrera presidencial- y los compañeros republicanos del congreso le aconsejen pasar pagina cuanto antes, sin solicitar –con derecho automatico, por la escasas diferencia- el recuento voto a voto de los 2 millones 300 mil papelas recogidas en el estado siempre conservador. George Bush ha sido el primero en expresar y escenificar esta mañana su deseo de poner al pais a tono con las nuevas circunstancias. Ha ordenado a su gabinete –a sus espaldas salvo Rumsfeld que daba una conferencia en Kansas mientras hacia esta declaracion- ha ordenado dar cuanta información puedan solicitarles los nuevos reponsables del legislativo, precissando que la guerra de Irak es la cuestion prioritaria aunque ahora con la advertencia de estar advierto a cualquier idea. El presidente ha dado la bienvenida y felicitado a Nancy Pelosiy. Y Pelosy la futura presidenta de la Camara, los agradecia antes de dar comienzo a un almuerzo de trabajo el la Casa Blanca, con la asistencia del vicepresidente Cheney, en el que seguro se habla de calendarios y de compartir agendas, siempre hasta ahora diferentes, aunque de cara a la galeria todo se hace con buenas palabras y por el mejor bien del pais.
jueves, 9 de noviembre de 2006
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