Estados Unidos ha llamado a capitulo al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para discutir con urgencia el anuncio-amenaza de Corea de Norte de realizar un prueba nuclear, un aviso calificado aquí de provocación aunque llegue sin fechas, pero justificándose según el régimen de Pyongant en la creciente amenaza estadounidense. Las palabras del embajador Jhon Bolton cuando en Naciones Unidas terminaba la llamada a capitulo del consejo de seguridad resultan clarificadoras… Esta vez el diplomático estadounidense si ha medido cada una de sus palabras y solo ha dicho, ha tratado de trasladar al sanedrín de naciones unidas la necesidad de hablar menos y hacer mas, poner en marcha la diplomacia que deberia marcar la estrategia a seguir para demostrar a Corea del norte que no es la actividad nuclear la que va a resolver mejor sus intereses. La amenaza que ha sentido Japón, que ha inquietado a Francia, que minusvaloraba Rusia. Encontraba en China otro portavoz cualificado para los llamados intereses de la región. Esta vez el embajador chino Wang Guangya decía en alto lo que muy bien suscribiría la adminitración Bush, es necesario que el grupo de los seis se ponga a trabajar y -si eso resultaba ambiguo para los periodistas que lo escuchaban- la solución era volver mañana y esperar a ver lo que pueda dar de si la reanudación de los trabajo en el Consejo de Seguridad.
martes, 3 de octubre de 2006
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