domingo, 2 de enero de 2005

CRONICAS . ESPAÑA A LAS OCHO2.01.2005Ayudar sin estorbar, explicar sin molestar… Estados Unidos, el dimisionario ministro de exteriores Collin Powell, quiere llevar a las zonas devastadas por el maremoto la solidaridad de un pueblo que ha multiplicado por diez –hasta alcanzar los 350 millones de dolares por ahora- las ayudas con las que se quiere paliar una catástrofe, que en palabras del presidente Bush, ha alcanzado una mortandad que desafia a todo entendimiento. La delegacion estadouniodense ramificara sus presencias entre delegados gubernamentales, entre los que no falta el gobernador de la Florida y hermano del presidente, Jeb Bush, y lideres del congreso que anuncia su proxima visita a paises como India o Sri Lanka. Naciones Unidas mantiene todavía su voz de alerta y a pesar de la ayuda internacional que ahora se multiplica, ha calculado en sus ultima estimaciones publicas, que son mas de dos millones de personas las que todavía necesitan de la colaboracion mas elemental para poder subsistir. Naciones Unidas quiere que la comunidad internacional no baje la guardia, que siga con su ayuda a los paies asiaticos asolados por el maremoto y eso sin renunciar a hacer un calculo de futuro poco optimista… dos millones de personas –dicen- necesitan todavía hoy de ayuda para sussibtir a un a pesar de los millones solidarios con los que estados unidos trata ahora de llevarse la plama… El dimisionario secretario de satdo Collin Powell acaba de anunciar una gira de urgencia por los pasies asiaticos mas afectados por el seismo, sin precisar mucho su agenda de intenciones, aunque siempre con el compromiso por adelantado de no molestar ni alterar las tareas de rescate y recontruccion. Estados Unidos ha comprometido hasta ahora 350 millones de dolares –diez veces mas de lo anunciado en un principio- con el proposito aparente de que esta cantidad es solo el prinicpio, los primeros que se conceden para paliar las necesidades ingentes que ha creado el maremoto en la region. Collin Powell estara acompañado en esta gira, entre otros, por el gobernador de la florida, Jeb Bush, hermano del presidente de los estados unidos y a quien se considera aquí un experto en situaciones de emergencia creadas por agentes naturales, como por ejemplo los huracanes que recientemente asolaban al estado del sureste.

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