George Bush acaba de poner la última piedra a lo que quiere ser la reforma mas ambiciosa de los servicios de inteligencia estadounidense. Es tarea que desde 2001 –los atentados del 11 de septiembre- se habia convertido en un asunto pendiente y hasta delicado debido a los singulares intereses que se reservan las 16 agencias de inteligencia. Es de todos sabido el tira y afloja del primer responsable nacional de la inteligencia –el embajador Negroponte- con el entonces ministro de la guerra Donald Rumsfeld, un jefe del Pentágono del que dependian otras tantas agencia militares a las que se les hacia muy cuesta arriba abandonar su autonomia a favor de una direccion centralizada. Ahora George Bush apuesta por dar todos los poderes al llamado director de la Inteligencia Nacional, cargo que desempeña en la actualidad un almirante como Jhon Michael McConell. El presidente de los Estados Unidos hace la reforma por decreto aunque despues de meses de consultas y debates muy discretos en y con la clase politica.. La portavoz Dana Perino confirmaba este mediodia los detalles que filtraban en sus ediciones de hoy periodicos como The Washington Post o The Wall Strett Journal. Queda ahora por saber si la orden ejecutiva 12333 que firmo Ronald Reagan en 1981 tiene con Goerge Bush una reforma en profundidad capaz de hacer olvidar los protagonisamos de agencia como la CIA o el FBI para que gane un protagonismo unico y exclusivo la DNI, esa que quieren que sea la genuina agencia de todas las agencias y que desde su creación en 2005 y queriendo resolver los problemas del siglo XXI ha vivido hasta hoy con mas penas que glorias.
jueves, 31 de julio de 2008
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