domingo, 25 de enero de 2009

Hay que obligar a Obama

La nieve es blanca y el asfalto sigue siendo negro. Obama lo sabía antes de llegar a jurar dos veces para convertirse en el 44 presidente de lo Estados Unidos. Después de todo, con la que está cayendo, Barack Obama no ha hecho nada diferente de lo que siempre había prometido. Voy siempre a deciros la verdad... y en esa estamos. Barack ha tenido ya sus primeras trifulcas con la prensa. Primero por unas fotos que solo dejo hacer a los profesionales de la Casa. Despues por un portavoz llamado Robert Gibbs capaz de ningunear preguntas incomodas. Obama empieza a tener que justificar el sueldo antes incluso de cobrarlo. Mas todavía. No ha cumplido ni la primera semana en el cargo, no ha parado de firmar con la zurda leyes y reformas, congelaciones de sueldo y compromisos de futuro (se compran planes para salir de Irak con la misma urgencia que cerrar Guantanamo) cuando ya hay voces que se encargan de recordarle compomisos recientes. Barack Obama hizo una carrera electoral cargada de mensajes. Algunos demócratas, compañeros hoy de gabinete, le acusaban de carecer de programa y de ideas. Obama nunca se lo recriminaba. Volaba alto y hablaba tan claro que todavía hoy son muchos quienes recuerdan sus mensajes. Ahora nadie podrá echarlos en saco roto. Están pegados por todas partes, menos en la página web de la Casa Blanca donde el cambio se ha llevado al idioma español por delante. Martin Luther King cumpliría esta semana 80 años. Obama tendrá este lunes la posibilidad de encender las velas. Firmará un decreto con el que rescatar de sus cenizas los compromisos de Kyoto. Será un nuevo gesto en esa difícil tarea de escenificar el cambio a un a pesar de que la nieve sigue siendo blanca y el asalto negro. Obama lo sabe y lo sabía. Hace menos de un año contaba en algunos mitines la historía vivida por A. Philip Randolph y Franklin Delano Roosevelt. El sindicalistas fue obligado por el presidente a cantarle las verdades, segun confesión de Eleonor su esposa. Roosevelt terminó aquel ágape pidendo a Randolph lo mismo que Obama reclamó a quien le había preguntado por cómo resolvería el conflicto entre Israel y Palestina. Soy solo un persona. No puedo hacerlo solo. Le pido, les pido -dijo Obama- que me obliguen a hacerlo. Y en esas estamos.

1 comentario:

Santi Barnuevo dijo...

Hola Magín,

Me alegro de haber encontrado tu blog, ahora que has dejado de ser el corresponsal en USA. Hemos aprendido y hemos disfrutado de lo que ha pasado allí gracias a ti. Espero que tu nueva vida laboral sea tan educadora. Un saludo desde RNE en Ceuta.