Hillary Clinton habla y Barack Obama, levemente inclinado escucha. Ella con las manos por delante, el por detrás. Están en un pasillo del palacio de convenciones de Washington, el acaba de hablar al lobby judio mas importante de este país. Ella se preparaba para hacerlo. Después pasaron las horas y finalmente Hillary Clinton anunciaba en cuatro lineas que su adios y el apoyo a Barak Obama sera el sábado El senador y candidato demócrata no ha perdido el tiempo, ha empezado por visitar estados como Virginia donde la suerte de la presidencia parece estar en juego. Un bastón africano –donado por uno de los asistentes a su mitin- le servía para amenazar a los congresistas si son capaces de no pasar su plan de seguro de salud. Hasta el lunes Obama cargará pilas sin actos públicos en su casa de Chicago. Antes ha querido dejar claro que algo debe de empezar a cambiar en Washington. Después de cinco meses de repetirlo en las primarias, hace unas horas, el comité nacional demócrata acaba de anunciar por expreso deseo de su candidato que no aceptará un solo dólar de lobbys y corporaciones que habitualmente se vuelvan en donar millones a las campaña presidenciales.
jueves, 5 de junio de 2008
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