La situación ralla la locura, entre la impotencia y el caos. Rita es ahora un huracán con fuerza 4, ha perdido intensidad, viaja a unos 16 kilomentros por hora, las aguas del Golfo de Mexico le ofrecen miles de plataformas petroliferas que con vientos de 210 kilomentros por hora quedan destrozadas, pero la gran prueba llegara en la madrugada del sabado, cuando Rita toque tierra en algun lugar de la cota de Texas o Luisina. La evacuacion obligatoria de casi dos millones de personas ha provocado tal caos en las carreteras que la gobernadora Blanco, en Luisiana, ha tenido que aconsejar a sus vecinos que elijan salir con dirección norte, para no ayudar a colapsar la huida de muchos tejanos que desesperados, despues de quince horas en un atasco, deciden regresar y esperar que sea lo que sea. Un autobus incendiado cerca de Dallas en la interestatal 45 añade dificultades a una caotica operación salida . Rita ha demostrado que incluso ahora con todas las atenciones de todas las autoridades competentes –el presidente Bush llegara a Texas, en las proximas horas- Rita ha demostrado que como todo huracán es impredecible y que siempre va a conseguir sacar a flote las incongruencias de lo que se ha hecho mal con el desarrollo… desafiando a la naturaleza y hasta construyendo ciudades donde el agua, las tormentas, los huracanes –en este caso- siempre acabaran siendo su problema.
ENCUESTAS
Es lo que Rita se lleva por delante. De momento muchos numeros, pero tambien alguna que otra encuesta que permite comprender que despues de Katrina el estadounidense empieza a estar preocupado por algo mas que los precios del combustible y la guerra de Irak. El huracan Rita, llega sin tiempo como para digerir Katrina, por eso, el precio de la madera conglomerada y el cemento ya esta por las nubes. Tanto o casi tanto como los precios de los combustibles, los plasticos y al final la comida de los todos los dias. La cartera del estadounidense medio tiembla y empieza a preocuparse ahora, segunda la empresa Ipson, por cuestiones mas soterradas e inolvidable como serian las relaciones entre negros y blancos o la seguridad de su propia vivienda. Cincuenta y seis por ciento de la población esta preocupada con el exodo de refugiados con salarios por debajo de 25 mil dolares anuales, con posibilidad de convertirse en sus vecinos. Cuatro de cada diez piden que se prohiban las construcciones en lugares peligrosos o expuestos a la furia de la naturaleza, un 54 por ciento de los encuestados todavía confia en la habilidad de sus autoridades para auxiliarles, pero por regla general todos tiemblan y hasta rezan cuando empieza a llover en Nueva Orleans sabiendo que solo quince centímetros de agua .una cuarta. volveria a plantear una seria amenaza a los diques de contencion o un huracán solo de fuerza 3, como la que puede llegar a tener Rita, arrasaria de nuevo la ciudad de Galveston en Texas, como ya ocurrio en 1900, cuando perdieron la vida 8000 vecinos.
ENCUESTAS
Es lo que Rita se lleva por delante. De momento muchos numeros, pero tambien alguna que otra encuesta que permite comprender que despues de Katrina el estadounidense empieza a estar preocupado por algo mas que los precios del combustible y la guerra de Irak. El huracan Rita, llega sin tiempo como para digerir Katrina, por eso, el precio de la madera conglomerada y el cemento ya esta por las nubes. Tanto o casi tanto como los precios de los combustibles, los plasticos y al final la comida de los todos los dias. La cartera del estadounidense medio tiembla y empieza a preocuparse ahora, segunda la empresa Ipson, por cuestiones mas soterradas e inolvidable como serian las relaciones entre negros y blancos o la seguridad de su propia vivienda. Cincuenta y seis por ciento de la población esta preocupada con el exodo de refugiados con salarios por debajo de 25 mil dolares anuales, con posibilidad de convertirse en sus vecinos. Cuatro de cada diez piden que se prohiban las construcciones en lugares peligrosos o expuestos a la furia de la naturaleza, un 54 por ciento de los encuestados todavía confia en la habilidad de sus autoridades para auxiliarles, pero por regla general todos tiemblan y hasta rezan cuando empieza a llover en Nueva Orleans sabiendo que solo quince centímetros de agua .una cuarta. volveria a plantear una seria amenaza a los diques de contencion o un huracán solo de fuerza 3, como la que puede llegar a tener Rita, arrasaria de nuevo la ciudad de Galveston en Texas, como ya ocurrio en 1900, cuando perdieron la vida 8000 vecinos.
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