Es una rifa, mas que un termometro de la situacion real del pais, pero en esa rifa los peores numeros sigue llevandeselos el presidente de los Estados Unidos. George Bush cae en todas las encuestas, y todavía es el protagonista principal de las muchas preguntas que se hacen a los colaboradores anonimos de cualquiera de los medios de comunicación, en especial a los lectores de Internet que aquí son legion. Bush, según la cadena ABC, ha caido en las dos ultimas semanas 9 puntos. Ha perdido en esa misma proporcion la solidaridad que le brindaban los evagelicos y los grupos religiosos mas conservadores, pero lo peor es que solo un 48 por ciento de los estadounidenses sigue confiando hoy en sus capacidades de liderezgo frente al 83 por ciento que lo apreciaban y santificaban despues de los atentados del 11 de septiembre del 2001. La opinión publica se hace conservadora en su filosofia, le gustaria en un 54 por ciento que las tareas de su gobierno se centrasen en asuntos de casa y un 56 por ciento confiesa que son las diferencias reacicales el problema urgente a resolver. Para consuelo de tontos, explicaciones: el presidente Bush todavía no sabe lo que es bajar en las encuentas al suspenso, tener numeros de aceptación por debajo del 40 por ciento- dicen- ese suspenso que conocieron sus antecesores, Bill Clinton y papa Bush, muy lejos tambien de conseguir el aplauso propio que sigue sin perder. Entre los republicanos de hoy, la compasión funciona, 8 de cada diez siguen encantados con su lider-presidente.
viernes, 9 de septiembre de 2005
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