CERRADO POR DESCANSO SEMANAL (6.08.2005-12)
Canyon Village, Mammoth Hot Springs, (WY)
Gardiner (MT), Livingston, Bozeman, Helena (MT)
Nos quedamos con las ganas. Fue mas corto de lo que habiamos imaginado. La llegada a la Puerta Norte, la que fuera la entrada original al parque Yellowstone, es nuestra puerta de salida. Tenemos que volver, es nuetra primera conclusion. A penas hemos visto nada. Solo hemos vivido la infinitesima parte de una aventura que ademas ha carecido de ruidos. Yellowstone tiene cinco zonas bien delimitadas para su visita, pero hemos echado de menos el sonido, esa llamada interior de un mundo salvaje que se agotaba entre el runrun de las pacientes caravanas que, siempre con educacion, estaban dispuestas a serpentear por carreteras ardientes con el unico placer de ser, en familia y por un instante, el tarzan de los asfaltos. El acceso facil en esta epoca a Yellowstone, las comunicaciones a traves de una red circular de carreteras, acabaran proporcionando al viajero una muestra de lo que se esconde en unos bosques que llegan a ocupar mas de un 70 por ciento de la superficie del parque. La region de los geiseres /toda la franja oeste, primordialmente/ fue la encargada de dar origen a la cultura ecologica que hoy pregonamos y defendemos. Pero lo que resulta mas llamativo y sorprendente es comprender que el visitante de Yellowstone lo que quiere es ver animales salvajes sin mas preocupacion que atraparlos en su camara fotografica. Por lo general, asi entendido, es turismo de pacotilla pero educadisimo y hasta extremadamente respetuoso con lo que acaba convirtiendose en interes general. No importa hacer una cola de media hora en cualquier esquina para llevarse en el video o en la digital ultimo modelo la gran cornamenta del ciervo macho que ha tenido a bien pasearse ante nuestros ojos. Otra cosa bien distinta, aunque en el parque los que hablan ingles mayoritariamente son japoneses, europeos y latinoamericanos, otra cosa bien distinta sera conocer cuantos dineros ha invertido desde hace casi seis anos la administracion Bush en estos menesteres y cuanto de lo que quiere ser y no es Kyoto podra afectar a esta pequena mini-selva urbanizada en la que los mas beneficiados a primera vista son los chicos de Xanterra, los encargados de la gestion hotelera y los primeros en colgar por estas fechas el letrero de no hay habitaciones libres en doscientos kilometros a la redonda. Y sin ruborizarse por cobrar precios de lujo a cambio de supuestos servicios que brillan por su ausencia. Ah, y ya puestos, cuando llegamos a Helena, capital del estado de Montana, ciudad de unos 45 mil habitantes y Capitolio de quita y pon, vimos lo nunca visto: el sabado las tiendas del centro y en su calle peatonal cierran a las cinco y el domingo todo el dia por descanso semanal.
Canyon Village, Mammoth Hot Springs, (WY)
Gardiner (MT), Livingston, Bozeman, Helena (MT)
Nos quedamos con las ganas. Fue mas corto de lo que habiamos imaginado. La llegada a la Puerta Norte, la que fuera la entrada original al parque Yellowstone, es nuestra puerta de salida. Tenemos que volver, es nuetra primera conclusion. A penas hemos visto nada. Solo hemos vivido la infinitesima parte de una aventura que ademas ha carecido de ruidos. Yellowstone tiene cinco zonas bien delimitadas para su visita, pero hemos echado de menos el sonido, esa llamada interior de un mundo salvaje que se agotaba entre el runrun de las pacientes caravanas que, siempre con educacion, estaban dispuestas a serpentear por carreteras ardientes con el unico placer de ser, en familia y por un instante, el tarzan de los asfaltos. El acceso facil en esta epoca a Yellowstone, las comunicaciones a traves de una red circular de carreteras, acabaran proporcionando al viajero una muestra de lo que se esconde en unos bosques que llegan a ocupar mas de un 70 por ciento de la superficie del parque. La region de los geiseres /toda la franja oeste, primordialmente/ fue la encargada de dar origen a la cultura ecologica que hoy pregonamos y defendemos. Pero lo que resulta mas llamativo y sorprendente es comprender que el visitante de Yellowstone lo que quiere es ver animales salvajes sin mas preocupacion que atraparlos en su camara fotografica. Por lo general, asi entendido, es turismo de pacotilla pero educadisimo y hasta extremadamente respetuoso con lo que acaba convirtiendose en interes general. No importa hacer una cola de media hora en cualquier esquina para llevarse en el video o en la digital ultimo modelo la gran cornamenta del ciervo macho que ha tenido a bien pasearse ante nuestros ojos. Otra cosa bien distinta, aunque en el parque los que hablan ingles mayoritariamente son japoneses, europeos y latinoamericanos, otra cosa bien distinta sera conocer cuantos dineros ha invertido desde hace casi seis anos la administracion Bush en estos menesteres y cuanto de lo que quiere ser y no es Kyoto podra afectar a esta pequena mini-selva urbanizada en la que los mas beneficiados a primera vista son los chicos de Xanterra, los encargados de la gestion hotelera y los primeros en colgar por estas fechas el letrero de no hay habitaciones libres en doscientos kilometros a la redonda. Y sin ruborizarse por cobrar precios de lujo a cambio de supuestos servicios que brillan por su ausencia. Ah, y ya puestos, cuando llegamos a Helena, capital del estado de Montana, ciudad de unos 45 mil habitantes y Capitolio de quita y pon, vimos lo nunca visto: el sabado las tiendas del centro y en su calle peatonal cierran a las cinco y el domingo todo el dia por descanso semanal.
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