Van tres días y no hay soluciones… Este jueves la Reserva Federal vuelve a tener todas las miradas encima. Ben Benanke ha conocido lo que es tener alborotado el gallinero. El segundo batacazo bursátil de la semana ha demostrado que ni la maquina de hacer dinero tranquiliza a los mercados. Nueva York ha vuelto a perder 449 puntos, la friolera de mas de 500 mil millones de dólares. La intervención de la primera aseguradora del pais AIG –intervención es la forma suave de llamar el crédito de 85 mil millones de dólares a pagar en dos años, que otro llaman nacionalización- la intervención ha traido de todo menos tranquilidad. Los fondos de pensiones se han quedado en nada y sus 78 millones de clientes saben que lo mejor es rezar y esperar que pase la tormenta. La crisis solo ha hecho que empezar y por su fuera poco hay mas datos para que el personal no pueda evitar el ataque de nervios. La construcción de casas nuevas en los Estados Unidos ha caído más de un seis por ciento el pasado agosto, lo nunca visto desde 1991. Si el ministro del tesoro tiene razón… hasta que no se estabilice el mercado inmobiliario poco podremos esperar de estabilizar el agitado mundo bancario para el ahora prometen reformas y controles mas rigurosos. El oro, mientras cae el petroleo, por las nubes.
jueves, 18 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario