El disputado voto latino ha tenido en esta larga campaña electoral estadounidense altos y bajos, sonoros sobresaltos hoy casi históricos –era el Guadalajara del convaleciente senador Kennedy su mejor y mas claro exponente- para terminar en vísperas de la gran decisión –el cuatro de noviembre- en uno de los mas sospechosos y largos silencios (()) Bill Richardson, el gobernador de Nuevo México que mas pelea con los demócratas por atraerse el voto de nueve millones de hispanos trataba a su manera de explicarse los inexplicable. Esta campaña que ha entrado ya en la última vuelta llegará a la meta sin que practicamente los candidatos demócratas y republicanos hayan tenido la oportunidad de hablar y decir cuales son sus planteamientos con los cerca de 12 millones de indocumentados, de los que no se ha olvidado el presentador estrella de la cadena de Univisión cuando tuvo la oportunidad de entrevistarse con la republicana Sarah Palin (()) La emigración y sus problemas son bien diferentes según donde y como vaya a parar la familia o el trabajador sin papeles. California, Nueva York, Illinois, Texas, Arizona, Nevada, Colorado Nuevo Mexico… los estadosu fronterizos y los que cada dia que pasa tienen que hacer realidad el otro sueño americano para quienes mas lo necesitan combaten a su modo un problema que hasta ahora los políticos se han quitado de encima pidiendo mas seguridad fronteriza y redadas como primera solución sorpresa (()) McCain y Obama – Obama y McCain han tenido la suerte de pasar muy de puntillas por la que sera su solucion y trato a la comunidad hispana. George Bush había conseguido eclipsar solo en palabras lo que antes fueron las promesas del presidente Clinton. La Casa Blanca por dos mandatos consecutivos fue republicana gracias a la ayuda latina. No hay vuelta de hoja, ganar la casa blanca pasa por recurrir a las minorias. Afroamericanos y latinos hacen sin embargo la guerra muy por su cuenta, hasta se llevan lo suficientemnte mal como para que estas elecciones sean un verdadero test de intereses. (()) Los latinos tienen su propio examen. Demócratas y republicanos van a enterarse y tomar nota. A priori, la comunidad latina, la mas numerosa y especial de las minorias, la que hasta hoy menos se le ha tenido en cuenta, puede acabar decidiendo con su voto quien es el próximo presidente de los Estados Unidos si como presumen suman finalmente un 10 por ciento en la participación electoral del próximo 4 de noviembre.
miércoles, 22 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario