miércoles, 8 de noviembre de 2006

BUSH, RUMSFELD, GATES: LA GUERRA

La llamada revolucion demócrata vivida en una larga noche electoral se ha quedado paralizada cuando desde la casa blanca, con campanillas de urgencia y antes de que el Presidente George Buhs enseñara al mundo la cara de la decepcion se anunciaba la dimision de Donald Rumsfeld, un colaborador extraordinario de esta administracion republicana convertido este miércoles en la primera victima politica de las llamadas elecciones de mitad de mandato. Bush defendia con la ayuda que le brindaba el no ser un presidente dotado de dotes comunicativas, Bush defendia que habia tomado la decision del relevo pensando -como comandante en jefe- lo que era mas importante para nuestras tropas. Hablaba con Robert Gates, (a quien ofrecia el cargo el pasado domingo) despues ayer se comunicaba con Donald Rumsfeld, quien supuestamente le habia pedido la renuncia. Pero no se sabe cuando porque solo hace una semana el presidente se esforaba en ofecer todo su apoyo no solo a Rumsfeld sino a su vicepresidente Cheney. El núcleo duro del gabinete, parece ahora, estar tocado, Hace unos minutos desde el despacho oval de la Casa Blanca, el presidente, su ministro dimisionario y quien ha sido llamado a sucederle coincidia en un cuestion que resulta fundamental. Estados Unidos está en guerra y no puede haceerse una transicion de poderes sin tener cubierta la cabeza de la secretaria de la defensa. Bush ha encargado la transmision a Rumsfeld hasta que el nuevo Senado examine y confirme a su candidato, un hombre siempre pegado a la agencia de inteligencia de la que fue director con papa Bush y ahora un fiel republicano que participa -con otro amigo de la familia Bush, el exsecretario de estado Jamens Baker, en preperar el que debe ser el nuevo manual para solucionar el contencioso Irak.

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