Las sorpresas quedaron para el recuerdo y en esta historia de las primarias democratas del 2008, las encuestas han empezado a dar en el clavo y los aspirantes a repetir los mensajes que poco o nada se apartan del guión. (()) Barak
Obama ha elegido volver al estado de Iowa para declarar que despues de la consulta en Kentucky y Oregón ya tiene la mitad más uno de los delegados que estaban en juego en primarias y caucus y que se siente mas cerca de la candidatura demócrata a la presidencia de los Estados Unidos.(()) Jugar con las palabras está permitido en política, pero con los números y las reglas del partido demócrata despues de ver otra goleada de Hillary Clinton al casi candidato Obama –ganaba por 35 puntos de diferencia en Kentucky- a nadie debería extrañarle que la ex primera dama no tire ni mucho menos la toalla.(()) Hillary está decidida a obligar a su partido, a los superdelegados y en otoño, a tomar la difícil decisión de escoger al candidato que tiene mas garantías de ganar la Casa Blanca al senador John McCain. Es un órdago a la grande porque ni Obama ni ella -dice- van a conseguir el pase, el número mágico esos 2024 delegados con los que jugarse la Casa Blanca. Asi las cosas mas de lo mismo, desgaste, dinero, y nuevas citas para marcar en el calendario y repartir esas migajas que no cambiaran nada porque solo restan por repartir un centenar largo de nuevos delegados
Obama ha elegido volver al estado de Iowa para declarar que despues de la consulta en Kentucky y Oregón ya tiene la mitad más uno de los delegados que estaban en juego en primarias y caucus y que se siente mas cerca de la candidatura demócrata a la presidencia de los Estados Unidos.(()) Jugar con las palabras está permitido en política, pero con los números y las reglas del partido demócrata despues de ver otra goleada de Hillary Clinton al casi candidato Obama –ganaba por 35 puntos de diferencia en Kentucky- a nadie debería extrañarle que la ex primera dama no tire ni mucho menos la toalla.(()) Hillary está decidida a obligar a su partido, a los superdelegados y en otoño, a tomar la difícil decisión de escoger al candidato que tiene mas garantías de ganar la Casa Blanca al senador John McCain. Es un órdago a la grande porque ni Obama ni ella -dice- van a conseguir el pase, el número mágico esos 2024 delegados con los que jugarse la Casa Blanca. Asi las cosas mas de lo mismo, desgaste, dinero, y nuevas citas para marcar en el calendario y repartir esas migajas que no cambiaran nada porque solo restan por repartir un centenar largo de nuevos delegados 




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